Ascensión Sanchez, modelo de mujer luchadora incansable, que se abrió paso en un mundo, entonces de hombres, y entregó su vida ayudando a las mujeres de forma concreta y real, trabajando por defender su dignidad.
Dos cruzadas llegan a Roma, en tren el 1 de mayo de 1950. Enviadas por el Padre Fundador, llevan los documentos de solicitud para la elevación de la Pía Unión “Cruzada Evangélica” a Instituto Secular. Hay huelga de transportes, y no encuentran otro acceso a la Ciudad que un modesto carro de verdura, y aun contentas de poder utilizarlo.